LA TRAMPA DEL AMOR ROMÁNTICO

EL PALACIO DE PAPEL – MIRANDA COWLEY HELLER

Autor reseña: Maite Mateos.

Sin duda esta historia tiene todos los elementos necesarios para ser un buen producto comercial, con un lenguaje sencillo, una trama narrativa que atrapa a través de un suspense centrado en un triángulo amoroso envuelto en mucha tensión erótica, con algunos episodios truculentos y trágicos atenuados por otros con un ligero tono poético.

Aunque a lo largo de la trama, que se desarrolla a lo largo de un día, en un lugar de veraneo llamado Cape Code, con sucesivos saltos al pasado, encontramos de todo, amistad, amor, traiciones, celos y muchas mentiras, a mí no me ha seducido.
Esta novela podría enclavarse en el género angloamericano conocido como chic-lit, una narrativa cercana al género de la novela romántica pero que, más allá de presentar a la mujer como una víctima la presenta como alguien en busca de su propia valía. El diario de Bridget Jones de Helen Fielding sería el máximo exponente de toda esta tendencia literaria. Pero en realidad, el chic-lit o literatura para chicas está muy lejos de poder considerarse una ficción post-feminista pues la chic-lit no hace otra cosa que enmascarar con un tinte de falso feminismo lo que no es más que la cultura del amor romántico, donde la mujer se ve envuelta una vez más en la trampa de ese rol de cuidadora y sufridora del que difícilmente logra escapar, esa trampa del capitalismo y el patriarcado.
El palacio de papel es la opera prima de una autora y editora norteamericana en la que el personaje principal es una mujer, Ellen Bishop, de unos cincuenta años, atractiva, carcomida por la culpa y el sufrimiento, por las sombras de su pasado y deseada por dos hombres a la vez. Quizá esto hoy día puede parecer inusual en la literatura, pero no lo es en la vida real y reflejarlo en una novela tiene cierta gracia. Y con todo, Ellen no deja de sufrir, de cuidar y cargar con todas las culpas de unos hechos que el mismo modelo patriarcal propicia. Realmente ¿son necesarias estas historias plagas de personajes femeninos que en su aparente lucha por desprenderse del yugo del patriarcado caen una vez más en ese mismo yugo, esa trampa del amor romántico que las esclaviza?
En El palacio de papel el final queda abierto, cierto, dando espacio a cierta reflexión acerca de lo efímero, de la fragilidad de lo emocional, pero abierto entre un amor salvador, un amor romántico u otro. La misma trampa una vez más.

Mis agradecimientos a Suma ediciones y a Babelio por proponerme la lectura de esta obra.